Month: June 2022

Esta iniciativa confirma el compromiso del Grupo VíasChile con la sustentabilidad y el mejoramiento de la calidad de vida de las personas.

En diciembre de 2021, junto a Red de Alimentos y Fundación Luksic, se inauguró la primera Despensa Social de Chile y Latinoamérica en la comuna de San Bernardo, con el objetivo de beneficiar la nutrición y salud de los adultos mayores, aportando alimentos o productos de primera necesidad y también como un espacio comunitario, donde se les puede prestar asesoría y tiempo para ser acompañados.

Esta Despensa Social no solo tiene un impacto en la salud y economía de los beneficiados, sino que además permite gestionar los alimentos donados por las empresas socias de Red de Alimentos.

A la fecha, 2.500 adultos mayores han podido cubrir sus necesidades de alimentos a través de este proyecto, que también genera un impacto en problemas sociales derivados de la situación en la que actualmente se desenvuelven, como la seguridad y problemas de salud.

Inicio del proyecto

VíasChile, a través de Autopista Central, contribuyó en el financiamiento de la construcción y parte de los costos de operación de los primeros tres años de la despensa que opera en San Bernardo, como parte de su política de apoyo a las comunidades que la empresa desarrolla en algunas de las comunas donde se encuentran las autopistas.

Para esto, en conjunto con Red de Alimentos, realizó el catastro que permitió identificar a los adultos mayores de la comuna que diariamente no alcanzan a cubrir sus necesidades básicas de alimentación. A través de la Despensa Social, los beneficiarios pueden retirar hasta ocho kilos de alimentos y productos de primera necesidad a la semana, sin transacciones de dinero de por medio. Cada persona inscrita tiene un turno y horario determinado para ser atendida y en las góndolas se especifica la cantidad de productos a los que pueden acceder libremente.

Andrés Barberis, director general de VíasChile, destaca esta iniciativa pionera que se desarrolla en un momento complejo para el país. Al respecto, afirma que ‘estamos viviendo momentos difíciles debido a una serie de factores y actualmente vemos cómo la pobreza en nuestro país ha tenido una lamentable alza. Por ello, a través de Autopista Central, nos comprometimos con Red de Alimentos para colaborar con esta iniciativa que tiene un impacto inmediato en las personas. Esta es la primera de varias acciones sociales que incorporan la economía circular que queremos desarrollar a largo plazo, y ojalá implementarlo en más comunas del país’.

Cabe destacar que el proyecto se sustenta gracias al aporte de Red de Alimentos, el primer banco de este tipo en Chile, el que constituye una alternativa sostenible para evitar la destrucción de alimentos y artículos de primera necesidad.

Beneficio a personas y al medio ambiente

El rescate de alimentos y artículos de aseo, entre otros productos, evita que se conviertan en residuos, lo que genera un impacto ambiental positivo al reducir la emisión de gases de efecto invernadero generada por su destrucción.

Según las mediciones mensuales de Greenlab, de la Dirección de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de la Universidad Católica de Chile (Dictuc), se estima que, con los productos rescatados por Red de Alimentos, se evitan 78 kilos de CO2e mensual por cada beneficiario. Esto significa que, con la entrega de productos a 2.500 personas de la tercera edad, se evita la generación de 2.340 toneladas de CO2 anualmente.

Luego de una convocatoria abierta que reunió a 6 equipos, un jurado especializado escogió la solución que mejor respondía a la necesidad de intervenir un centenar de pequeños vertederos ilegales identificados en la comuna.

El Desafío Microbasurales Renca surgió en el marco de un esfuerzo público-privado que impulsa la Municipalidad de Renca por medio de la Mesa Territorial de Empresas de la macrozona Pepper-Lo Ruiz, en la que participan 12 compañías de la zona, la Corporación La Fábrica de Renca y la Fundación Do! Smart City.

“De los 142 puntos identificados como microbasurales y vertederos ilegales en la comuna, cada año se retiran un promedio de 26.500 toneladas de residuos por el Municipio, con un costo anual promedio de $550 MM CLP. La persistencia del problema de los microbasurales y vertederos en la comuna se ha convertido en una problemática institucional que ha requerido los esfuerzos y coordinación de varias direcciones de la Municipalidad para poder abordarlo”, aseguró el alcalde de Renca, Claudio Castro.

El concurso, que recibió cerca de 50 ideas de vecinos, vecinas, estudiantes y emprendedores de las regiones de Arica, Valparaíso, O´Higgins y Metropolitana, tuvo como objetivo generar un proceso colaborativo para el desarrollo de ideas que puedan hacer frente a la problemática de los microbasurales en la comuna. Con dichas ideas se crearon 6 grupos que participaron de una jornada de 10 horas en el Centro de Innovación de Renca en que fueron acompañados por mentores y expertos para profundizar en el problema, mejorar la idea y preparar el pitch que sería presentado frente a un destacado jurado que contó con la participación de Gloria Moya, Directora Corfo Región Metropolitana, Mauricio Fabry, Coordinador de Medio Ambiente del GORE y Macarena Olivares, Directora de DIMAO de la Municipalidad de Renca, entre otros.

La idea ganadora, denominada Re-recupera, tiene como objetivo crear un canal que facilite la recepción de aparatos electrónicos y electrodomésticos de los habitantes de la comuna de Renca, lo que permitiría que estos elementos terminen en microbasurales o vertederos ilegales.

El equipo ganador, conformado por Gabriela Poblete, Yessenia Soto y Julio Zuñiga, recibirá $5.000.000 para desarrollar y pilotar su idea con usuarios de la comuna. Para esto, la municipalidad y la Corporación La Fábrica acompañarán al equipo para llevar a cabo el proceso iterativo del desarrollo de su propuesta y puesta en marcha del piloto.

La iniciativa contó con la colaboración de Innova UTEM, Inacap, Aceros AZA y Vías Chile, ya que es una buena oportunidad para implementar estrategias a mediano y largo plazo distintas a las ya desarrolladas, para solucionar este problema de una vez por todas con una solución multidimensional, integral, y sostenible.

“Es un orgullo haber sido parte de esta iniciativa donde apoyamos proyectos que buscan soluciones sostenibles e innovadoras con el propósito de contribuir a prevenir y reducir microbasurales en la comuna de Renca y el país. La alianza público-privada, además de la escucha activa, han sido clave para avanzar en la materialización de Desafío Microbasurales, que nace de la participación activa en la mesa de trabajo territorial de medio ambiente. Como vecinos de Renca, esta es una instancia que nos une y nos permite trabajar de manera conjunta en posibles soluciones a largo plazo para erradicar focos de Microbasurales que afectan el bienestar de quienes residen en la comuna. Felicitaciones a todos los equipos que participaron y muchas gracias a cada uno de los que están comprometidos por lograr ciudades sostenibles”, María Pía Tejos, Gerente de Relaciones Institucionales y Sostenibilidad de Grupo VíasChile.

En esa misma línea, la gerente de Sostenibilidad de Aceros AZA, Paola Grandela, añadió que “es un agrado ser parte de una iniciativa que busca mejorar nuestros espacios y transformar la calidad de vida de cientos de familias. Nosotros, además de ser un vecino más de esta comuna, somos una empresa que produce acero a partir del reciclaje, por ende, estar acá nos hace perfecto sentido. Asimismo, estamos comprometidos con ser un agente de cambio activo en las problemáticas que afectan a los vecinos del sector, contribuyendo a disminuir otros factores de riesgo. Una comuna más limpia, es sin duda una comuna más segura”.

Renca, al igual que otros lugares de Chile, sufre de la existencia de microbasurales y vertederos ilegales en su territorio, afectando directamente la calidad de vida de la comunidad y los ecosistemas. Pese a los esfuerzos que realiza el municipio, se ha detectado que gran cantidad de vehículos no autorizados aprovechan la conectividad otorgada por las carreteras urbanas que rodean Renca para botar residuos en sitios baldíos o directamente, en bienes nacionales de uso público.